Subir y subir, no importa como, no hay otra alternativa.. Billy A. Rodríguez
Julio del 2006
Del 7 al 12 de agosto será el Giro de Utah. La última competencia saldrá del Deer Vally, bajaran por Heber, pasarán por el Canyon de Provo, para luego enfilarse por el Alpine Loop y descender hasta Salt Lake y luego subir el Big Wood Cotton Canyon, ahí será la final en uno de esos resort para esquiar. Las bobedas de granito que contienen el registro genealogíco más grande del mundo esta por estos lugares.
Para conocer donde sería la final, y para no dar la gran vuelta, yo decidí cortar distancia. Y parti de Park City a Salt Lake por el Big Wood Cotton Canyon.
Como a tres millas del inicio de mi recorrido desde el Jeremy Ranch pinché llanta. Había tanto sol, que un incidente de este tipo a estas horas de la tarde, por tanto calor se corre el peligro de una buena deshidratación..
No sé si la ansiedad por llegar a Park City, o si en verdad es lejos, llegue viendo lucecitas. Busque la ultima gasolinera donde pudiera llenar todos mis contenedores, y continué mi camino.
De todas las escaladas, creo que esta ha sido la más descabellada, sí que es empinada!!, y no solo eso, sino que como fue improvisada, no opte por los mejores recursos entre ellos una mejor bicicleta. (condicion fisica tampoco lo habia)
Así que, a pesar de conquistarla, montado o caminando, el último tramo fue con dolor en ambas piernas, una clara manifestación de deshidratación.
Luego me toco un pequeño descenso que aproveche para relajarme, para luego encontrar la última empinada, carretera de terracería que mejor decidí caminarla. (El dia se estaba llendo muy rapido y sufrí un poco de ansiedad en este lugar). Una bicicleta para carretera no es la mejor opción para este terreno. No tuve otra opcion que continauar con mi vía crucis.
Había viento y frió en la cúspide. Estuve un ratito, y decidí bajar lo antes posible, ya me quedarían unos 20 minutos de luz, por lo que me despetaque desde ahí, hasta llegar a Salt Lake.
La preocupación más grande en esas áreas es que un conductor absorvido por la naturaleza se detenga en cualquier lugar y uno no tenga tiempo para frenar. Hay areas donde uno puede alcanzar facilmente las 40 millas por hora.
A pesar de los inconvenientes del cansancio, todo salió perfect, alcance una cola de autos y descendí en medio de ellos utilizando el carril completo.
Saliendo del Canyon continué por la misma calle hasta llegar a la Estación del Tren.
Como que si este me estuviera esperando, apareció cuando llegue, lo mismo me pasó con el último bus que me conduciría a Provo.
En cuanto al tiempo, no cambio en nada, a las 11:30 llegue a la casa.