Junio 8
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Alpine Loop - Primavera
La primera sorpresa que me lleve, fue la Maratón del Condado. Pero me ayudo. Ver tantos participantes de todas las edades. Ahí me encontré a un chinito que juega soccer con nosotros.
Me dio tanto gusto, además de aprovecharme de cada estación de reabastecimiento. En una de las últimas encontré naranjas y también gel de energía. Creo que esta última fue determinante para que terminara esta aventura.
Cuando la competencia se desapareció de mi camino, me puse un poco triste, de ahí para adelante me tocaría viajar solito. A pesar de que encontré a muchos jóvenes y familias haciendo deportes. Es interesante ver a la muchachada en esas bicicletas cuaches, y la mama pollito con sus hijitos tratando de aprovechar un bonito sábado.
Casi llegando al velo de la novia, encontré a una madre afanada con un montón de niños. Se veía frustrada porque algo no podía resolver con las bicicletas. Le ofrecí mi ayuda, me explico que era el problema, y entre los dos improvisamos la solución. Me pregunto qué de donde era yo, le dije mi país, y luego me dijo, mi tío acaba de regresar, estuvo como parte del a presidencia del área en tu país.
Luego continúe, llevaba una oración en mi mente por aquella mujer. Ojala que lo que improvisamos le haya servido para tener un bonito tiempo con los niños.
Yo no podía relajar los músculos de mis piernas, sabía que me faltaba poco para empezar a escalar, y con mis músculos tensos quizás no podría subir.
Ya en el Vivian Park, descanse. Generalmente no lo hago ahí, pero había tanto sol, además yo andaba desvelado. Y ahí sentado, pensé, ¿por qué no puedo ser normal?. La mayoría llega hasta aquí, y se regresan felices por donde llegaron... y yo, aun ni he llegado al pie de la montaña para empezar mi sufrimiento.
Me hidrate bien, el próximo segmento era el más desafiante, y determinante. Ahí use el gel que me robe en la último abastecimiento, y partí bajo el penetrante sol.
Cuando empecé a escalar Sundance, me dolían mis piernas, y mi subconsciente me dio una orden fuerte que me asusto. Me dijo. Regrésate, te lo ordeno. Y sin esperar una respuesta, se quejo. Te desvelas, te golpeaste el miércoles, y quieres que estemos aquí contento bajo este fuerte sol para apoyarte...
Su demanda me asusto, además tenía toda la razón del mundo. Le dije, solo lleguemos a Sundance y platicamos de nuevo, te prometo que ahí evaluaremos y tomaremos la mejor decisión.
Por el momento apóyame para llegar ahí.
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Mis piernas se empezaron a acostumbrar al esfuerzo por subir. De vez en cuando soplaba un viento para arriba de aire fresco. Y al fin llegamos a Sundance. Sundance estaba tan alegre, había competencias de bicicletas y era todo un ambiente de fiesta.
Tal como le había prometido a mi subconsciente, evaluamos. El argumento que le dije. Hagamos el intento de cruzarlo, ¿oh a caso quieres regresar? Terminemos de una vez esto. Yo no quiero regresar después de tanta preoparación.
Hare el intento de llegar Aspen Grove, y si llegamos ahí, hará falta solamente el sector montañoso, y luego será igual bajar por cualquiera de los lados.
Aspen Grove es tan bonito, descanse un rato ahí bajo la sombra, y luego escale la parte más montañosa que sabe curar y dar todos sus encantos.
Los arboles dan su sombra, y esta vez me dieron un verde tierno de bienvenida. A estas alturas, el clima cambia, y todo actúa de una forma misteriosa. Es tan majestuoso, que también la actitud de la gente cambia. Encuentra uno a las personas más amables, y la mayoría de los autos terminan siendo corteses y amigables.
Llegue a la cima, me comí la última barra de chocolate como premio y me pegue el bajón por el otro lado, transitar en la ciudad, no tiene nada de bonito, especialmente ese sector de Ceder Hills para Plasant Grove que para el ciclismo es el peor segmento de carretera que he transitado por años. Voy a demandar a ambas ciudades.
En la última gasolinera que pase, me encontré a una mujer que trabajaba en otra gasolinera cerca de la casa y me pregunto.. ¿Hasta aquí te viniste?. Yo no le quise dar explicaciones, que venia de mas lejos, de las montañas.. estaba tan cansado para darlas..
Tome la Geneva Road hasta mi casa, el mismo recorrido de la semana pasada. Lo único que alegra esas millas, es ver pasar el nuevo tren de pasajeros.
Un total de 56 millas, (94 kilometros). De los 4500 pies, hasta los 8080 de altura.